"A menudo lo que es bueno para la vida es malo para la literatura, y lo que es malo para la vida es bueno para la literatura. (...) La comida del escritor está en los conflictos, en las crisis."
Sobre todo, aunque reconoce la gravedad de la crisis, el autor de Soldados de Salamina, El Monarca de las Sombras, Terra Alta... la ve como una oportunidad para que la literatura dé un sentido después de los hechos, cuando la batalla ha terminado y el polvo se ha asentado.
Confinado en su casa en Verges (Barcelona), actualmente está trabajando en el segundo volumen de Terra Alta, la novela que le valió el 68º Premio Planeta, el más dotado de la literatura en lengua española. El primer volumen, su última publicación, trataba de la investigación de un policía en Cataluña tras los mortales atentados de agosto de 2017.
"Esta crisis de Covid, si no fuera una catástrofe colectiva, sería una bendición personal: tengo todo el tiempo del mundo para escribir, para leer, que es mi vocación. No es lo mismo estar confinado por vocación, porque es tu trabajo como escritor, que por obligación"
Sin embargo, la lucha contra el virus, añade, revela un poco más de nuestra fragilidad. ¿Una oportunidad, tal vez, para crear conciencia?
"Creíamos con un optimismo temerario que estábamos protegidos por la ciencia, la tecnología de este virus. Fue en el reino de la imaginación, el reino medieval... (...) Hoy descubrimos nuestra total fragilidad."
Algunos libros de este autor:
Fragmentos sacados de la entrevista realizada al escritor por France Culture (2020/05/11). Aquí tenéis el enlace:
https://www.franceculture./regards-decrivains-en-temps-incertains-javier-cercas
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